Cada vez que uno trabaja el personaje para una obra es como hacer una pintura o hacer un escrito para la universidad. Comienzas con papel en blanco, que francamente intimida, y poco a poco va cogiendo forma hasta que tienes el producto final.
En este caso, en lugar de usar un pincel o un teclado…usas tu cuerpo, tu voz y tu mente. Por eso es que muchos actores terminan locos. Ahora imagínate estar forzando tu cuerpo y tu mente a ser otra persona por tres meses…o más.
Yo comencé a desarrollar en agosto un personaje que había sufrido un derrame y por eso terminó paralizado y con diálisis y 80 revoluces.
Yo interpreto al personaje en dos etapas de su vida:
1. Apenas recobrando el control de sus habilidades motoras…sujeto a una silla de ruedas que él ni puede controlar.
2. Ya con más control, pero usando un andador.
El reto más grande es la etapa uno. Es una persona paralizada casi completa y que apenas puede hablar. El reto es hacerlo creíble y que no parezca que me estoy mofando de las personas con discapacidades. Desde el primer día…ese era mi reto.
El director me recomendó que usara de ejemplo la película MyLeft Foot con Daniel Day Lewis. Este es el ejemplo que más o menos usé para hacer el personaje.
Pero nunca conté con que era año de elecciones
Justo cuando ya tenía el personaje como lo quería, con todos los movimientos bruscos sacados de la película y mi expresión facial paralizada…uno de los partidos políticos pautan este anuncio para su campaña.
Mi reacción al ver el anuncio fue…NOOOOOOOOOOO (Ok no…en vdd fue, “kakita” en inglés)
El anuncio ese hizo una controversia enorme y para colmo de males era bien parecido a mi personaje.
Chévere…ahora la gente va a decir que estoy mofándome de ese señor.
TRES meses trabajando un personaje para que sea realista y lleve un mensaje de que todavía existen milagros y ahora sale este anuncio y tengo que ajustar TOOODO lo que hice.
Malditas eleccioneeeees.
Cómo lo resolví
Al final no podía cambiar mucho, pero sí tuve que eliminar el meneíllo que había sacado de la película y lo hice un poco más pasivo…aparte de unos cambios menores a la voz.
Al final fue un éxito, gracias a Dios, y las personas aceptaron bien al personaje. Inclusive me preguntaron si yo había padecido de algo porque me quedó muy bien (todavía no sé si eso era un insulto fino).
Cuida tu trabajo de lo que ocurre a tu alrededor para que no distraiga el mensaje que quieres llevar
Recuerda que vives en un mundo real donde la gente sabe de las cosas que ocurren, y eso puede afectar tu trabajo creativo.
Yo hice un cambio en mi personaje porque no quería que me asociaran con una campaña política controversial. Si no hacía el cambio podría chocar con su sensibilidad y causar que la gente se distraiga del mensaje.
Recuerda que el mensaje detrás de tu trabajo creativo es más importante que todo lo demás; cuídalo de cualquier cosa que puedas hacer que impida que llegue a su objetivo.
Comenta…
¿Alguna vez has tenido que cambiar algo porque podría interrumpir el mensaje que estás llevando?