Todo tiene su tiempo. Hay un momento bajo el cielo para toda actividad: (Eclesiastés 3:1 RVC)
Ay yo no sé tú, pero por cada cosa que quiero hacer con todo el corazón, hay tres otras cosas que no quiero hacer, pero que tengo que hacer!
Cuando era estudiante, quería trabajar de lleno en un proyecto en particular, pero tenía exámenes que estudiar. Recuerdo que una vez era mi cumpleaños, pero tenía que esperar para celebrarlos porque tenía tres exámenes ese mismo día.
Ahora es lo mismo….obviamente, a mi me gustaría dedicar un día completo realizando la mitad de las ideas que tengo para este blog y otras cosas, pero tengo un trabajo y responsabilidades en mi casa que mi esposa con mucho gusto me las recuerda. A mi me encantaría poder aceptar las múltiples invitaciones que me hacen para entretener en diferentes actividades en horas laborables (que pagan bien, BTW)…pero tengo un compromiso con mi empresa y no puedo ir. Sería Super duper tener un clon que se encargue de lavar carros, pintar, hacer compra, llevar los carros al taller, trabajar y que se enferme por mi para hacer todo lo que yo quisiera hacer. Pero no es así…no existen…no hay break.
Tenemos que aprender a manejar el tiempo.
Si te dejas llevar por los primeros párrafos de este artículo, te vas a dar cuenta que no soy un experto en manejo del tiempo ni nada de eso…pero te voy a compartir algunas cosas que he aprendido dando golpes y cometiendo errores.
Tener todo el tiempo libre para hacer lo que quieres no es la solución.
Todo lo contrario…es una forma segura de no hacer tres divinos! Es como cuando uno tiene mucha hambre que siente que el estómago va a formar un hoyo negro y te va a succionar de adentro hacia afuera, pero cuando comienzas a comer te llenas rápido. Pues más o menos lo mismo. Tan pronto te veas con todo el tiempo del mundo para hacer lo que quieres, vas a terminar haciendo nada. No sé porque pasa esto…pero me parece haber escuchado que el término científico para esto se llama “ser un anormal”. La verdad es que el tener el timpo limitado es una oportunidad que vamos a aprovechar para lograr muchas cosas. Y comenzamos por:
Establece prioridades
No puedes hacer todo a la vez…esa es la verdad. Ni siquiera Dios quiso hacer el mundo de un solo golpe. Primeramente decidió el orden de prioridad para hacer las cosas y luego las hizo una a una. Imagínate si nos hubiese creado antes de que separara el mar de la tierra…hubiésemos sido sirenos o algo así.
Haz una lista de las cosas que tienes que hacer y las que quieres hacer, y para cada día decide el orden de prioridad de cada una y estima más o menos cuanto tiempo te tomaría. Seguramente tus responsabilidades deben tomar el primer lugar…lo cual te adelanto que así debe ser. Algo que debes recordar es que lo que para ti es prioridad, para los demás puede que no lo sea…así que quizás tengas que re calcular o simplemente defender tus prioridades.
Un ejemplo sería que tienes que estudiar para un examen lunes y prepararte para una actividad el domingo antes. Separa en tu agenda toda la semana para estudiar lo más posible. El sábado separa la mañana para estudiar un poco más y la tarde para prepararte para el domingo.
En este punto casi siempre va a predominar las cosas que tienes que hacer y las que tienes que cumplir. Lo cual hace más delicioso hacer lo que quires hacer.
Haz que lo que quieres hacer sea recompensa de lo que TIENES que hacer
Si has estado con ganas de ir al cine todo el mes, pero no has podido…ponlo en la agenda como premio por hacer todo lo que tienes que hacer. Créeme que es la mejor sensación del mundo. Hay veces que en mi casa decimos: Vamos a terminar estas tareas para ir a comer y al cine en la tarde. Esta meta que nos pusimos nos hace cumplir con lo que tenemos que hacer con más enfoque porque sabemos que tenemos algo a que aspirar al final. Inténtalo…vas a ver que vas a trabajar con una energía como si te hubiesen inyectado esteroides con Red Bull y café.
Por si no quedó claro…PONLO EN AGENDA
El listado que mencioné de tareas que debes poner en agenda incluye las cosas que quieres hacer. En otras palabras…debes poner en agenda hacer responsabilidades como ir a una cita médica y pasa tiempos como ir a la playa. Planifica para pintar la casa, estudiar para un examen y planifica para ver una película, salir con tus amistades y leer la Biblia. Cuando tenemos el tiempo limitado para cuplir y disfrutar…es bueno no dejar el espacio para que aparezca algo que nos dañe lo que queremos hacer. Parece aburrido, pero vas a agradecer haberlo hecho.
Tu turno
Recuerda que solo podemos hacer una cosa a la vez…así que planificar nuestro tiempo es indispensable no solo para nuestra vida sino también para nuestra creatividad. ¿Qué otra técnica conoces que nos pueda ayudar a manejar el tiempo? Sería bueno conocerlas para aprender nuevas maneras de ser más efectivos…así que compártela…sería super duper de tu parte.